Orar con Sinceridad

Una oración sincera nace de una relación genuina con Dios. Al igual que en cualquier relación, la comunicación con Dios es de doble vía. Debemos buscarlo activamente, escuchar lo que tiene que decirnos y estar dispuestos a recibir Su respuesta, sea cual sea. Para que Dios responda nuestras oraciones, debemos tener una relación basada en la sinceridad y la disposición de aceptar Su voluntad. No Orar con Egoísmo El peligro de orar con fines egoístas no debe subestimarse. Cuando nuestras oraciones se centran en el deseo de obtener cosas para ser vistos o aceptados por otros, estamos orando mal. Este tipo de oración puede parecer inofensiva, pero en realidad es un reflejo de soberbia. Dios no responde oraciones que buscan nuestra propia gloria. Del mismo modo, cuando oramos por relaciones que no están basadas en la sinceridad o en el amor genuino, sino en deseos egoístas, no podemos esperar una respuesta positiva. Dios ve nuestras intenciones y nos llama a ser humildes, a orar con un corazón puro.

5/8/20241 min read

man in gray jacket and black backpack standing on green grass field near mountain during daytime
man in gray jacket and black backpack standing on green grass field near mountain during daytime

Crecimiento espiritual diario